La tecnología avanza a pasos agigantados de tal manera que el mercado, los clientes y los empleados se están digitalizando, por lo que apostar por una transformación digital para tu organización te ofrecerá nuevas oportunidades de negocio y te preparará para los retos que exige el mercado.

La transformación digital no es un producto ni una solución que se pueda comprar. Se trata de un proceso constante que implica nuevas tecnologías y formas de trabajo para mantener la competitividad a través de la innovación permanente. Debe combinar las tecnologías, los procesos y la cultura de manera armoniosa.

Para lograr una buena transformación digital y que esta se adopte como parte de la cultura organizacional de una empresa se  necesitan analizar algunos criterios para su óptima implementación.

• La transformación digital es más que tecnología

Una empresa podría tener la estrategia digital más sofisticada pero el esfuerzo será en vano si su fuerza laboral decide no adoptarla.

• La disparidad cultural puede afectar la productividad

Si la transformación digital no está alineada con la cultura de la empresa, se podría experimentar una lenta adopción por parte de los usuarios y pérdida de productividad. Se recomienda ajustar los cambios de manera gradual y evitar afectar los objetivos del negocio.

• Los valores de la empresa contribuyen al éxito de la transformación digital

Es más probable que las empresas que construyen una cultura de transparencia, responsabilidad y disrupción obtengan todos los beneficios comerciales dentro de los plazos establecidos para la adopción de los cambios. Una cultura de mejora continua también es más propicia para la realización oportuna de beneficios.

Es así que para garantizar que la cultura organizacional de una empresa sea favorable para una exitosa transformación digital se necesita aplicar los siguientes puntos:

1. Evaluar la cultura en todos los niveles de la organización.

La mejor manera de realizar esta evaluación es desarrollando un plan de gestión del cambio para ayudar a la fuerza laboral a adoptar la nueva tecnología y los procesos comerciales. En la evaluación, es importante identificar cualquier posible barrera que pueda existir ya que podrían tener un impacto negativo en la iniciativa digital.

2. Identificar y comunicar valores culturales.

El personal deberá comprender los valores de la empresa que ayudarán a que la transformación tenga éxito; también es importante comunicar de manera clara la gestión del cambio, con oportunidad para comentarios y preguntas por parte de los colaboradores. De lo contrario, se podría experimentar retroceso y resistencia.

3. Exponer cómo se alinea el proyecto con los valores actuales. 

Se tiene que tener claro que la organización sufrirá muchos cambios, sin embargo, hay ciertos aspectos del negocio que pueden quedarse igual, y la nueva tecnología probablemente se alineará a estos aspectos, haciendo que los colaboradores no se sientan desplazados del todo y vayan adoptando los cambios de manera positiva.

4. Desarrollar nuevas métricas de desempeño y estructuras de incentivos. 

A lo largo del proyecto y los años posteriores a la puesta en marcha, es importante realizar un seguimiento de la realización de los beneficios utilizando indicadores clave de rendimiento. Algunas métricas a considerar durante las evaluaciones de desempeño de los empleados pueden ser los tiempos de respuesta de los clientes potenciales y las tasas de conversión, por lo que los empleados deben ser recompensados ​​cada vez que sus contribuciones o ideas innovadoras impulsen los beneficios que la transformación digital pretende lograr.

La cultura de la empresa influye en el ritmo de innovación de ésta porque la transformación digital requiere que tanto los altos directivos, como los colaboradores estén dispuestos a asumir riesgos y aprovechar las oportunidades.

En Cibergestión desarrollamos plataformas tecnológicas que soportan la externalización de procesos, basadas en el alto conocimiento que hemos desarrollado en 40 años de experiencia en el mercado internacional, y productos enfocados a reducir tiempos y gestionar flujos de actividades, como lectura óptica de documentos, gestor documental informático, chatbots con inteligencia artificial para la atención al cliente 24/7, entre otros.