Por José Ángel Borbolla Bolívar, CEO de Cibergestión
Tuvimos la oportunidad de celebrar la segunda edición del Cibergestión Summit 2025 en Bogotá. Más de 200 líderes de Colombia y de toda Latinoamérica nos acompañaron en un espacio de conversación, colaboración y visión compartida sobre el futuro del ecosistema hipotecario. Fue un momento clave que marca un antes y un después en el camino de la digitalización de nuestro sector.
Desde Cibergestión hemos invertido más de 5 millones de dólares anuales en innovación para seguir consolidándonos como referentes en la gestión hipotecaria de la región. Al cierre de este año proyectamos alcanzar un 35% de participación de mercado en Colombia, y ya lideramos con un 48% en México, 52% en Chile y 34% en Perú, preparando además nuestra expansión a Brasil y Argentina.
Tecnología que conecta y transforma
En este evento tuvimos la oportunidad de compartir cómo PRESTO, nuestra plataforma tecnológica, ha sido diseñada para orquestar de principio a fin cada proceso hipotecario e inmobiliario. Con ella garantizamos trazabilidad, seguridad y cumplimiento normativo, al tiempo que integramos a bancos, fiduciarias, notarías, constructoras, proptechs y valuadores en un mismo ecosistema. El resultado: trámites más ágiles, seguros y confiables para miles de familias.
Retos que enfrentamos en la región
Durante las conferencias quedó claro que la tecnología es un habilitador fundamental, pero no puede aislarse de la realidad económica de cada país. En Colombia, por ejemplo, los altos costos en insumos importados, la inflación en cemento y mano de obra, así como la incertidumbre en los subsidios VIS (Mi Casa Ya), han frenado el inicio de nuevos proyectos y encarecido la vivienda.
Sin embargo, otros países nos muestran rutas interesantes: Brasil mantiene una construcción robusta con alta demanda y financiamiento; México crece con fuerza en el mercado residencial apoyado por políticas públicas; y Perú comienza a mostrar un repunte dinámico, especialmente en Lima.
Una promesa cumplida
Para mí, este Summit confirmó algo que vengo repitiendo desde hace tiempo: la transformación hipotecaria en Latinoamérica ya no es una promesa, es una realidad en construcción. Reunir a todos los actores —bancos, constructores, fiduciarias, proptechs y notarías— nos permitió comprobar que, cuando se orquesta el ecosistema, se reducen fricciones, se generan eficiencias y se abren oportunidades reales para las familias.
Nuestro gran reto ahora es escalar estas soluciones, acortar los tiempos de ciclo y mantenernos firmes en el compromiso de que cada vez más personas puedan acceder a su vivienda de manera ágil, transparente y segura.
Estoy convencido de que solo trabajando juntos podremos lograr un impacto real en el sector hipotecario y, sobre todo, en la vida de quienes sueñan con su hogar.