Por Carlos Symor ,director de negocio BPO en Cibergestión

  1. Digitalización y omnicanalidad: Un proceso 100% digital o híbrido, donde el cliente pueda avanzar desde cualquier dispositivo y sin necesidad de visitas físicas, mejora la accesibilidad y reduce tiempos de respuesta.
  2. Asesoría personalizada: Aunque la tecnología juega un rol crucial, la asesoría humana sigue siendo indispensable. Contar con expertos que guíen al cliente en la toma de decisiones fortalece la confianza y fidelización.
  3. Procesos ágiles y simplificados: La burocracia sigue siendo una de las principales quejas en el sector. Reducir la documentación, agilizar la validación de datos y eliminar trámites innecesarios puede marcar la diferencia.
  4. Transparencia y educación financiera: Un cliente informado toma mejores decisiones y se siente más seguro. Ofrecer información clara y accesible sobre tasas, plazos y costos adicionales mejora la percepción del servicio.

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